La cogeneración es el procedimiento mediante el cual se obtiene simultáneamente energía eléctrica y energía térmica útil (vapor, agua caliente sanitaria).

La ventaja de la cogeneración es su mayor eficiencia energética ya que se aprovecha tanto el calor como la energía mecánica o eléctrica de un único proceso, en vez de utilizar una central eléctrica convencional y para las necesidades de calor una caldera convencional.

Funcionamiento
En una combustión normal, los humos son expulsados a altas temperaturas, mientras que en la cogeneración, el humo se enfría antes de salir para aprovechar el calor residual en otros procesos.

Además de ser un sistema altamente eficiente, disminuye la contaminación, dado que por cada unidad eléctrica producida son solamente necesarias 1,5 unidades, frente a las 3 necesarias en la generación térmica convencional.

La contaminación se reduce entonces al 50%. Para producir una unidad eléctrica por medios convencionales se necesitan 3 unidades de energía, mientras que en cogeneración se necesitan 1,5 unidades de energía, por lo que la cantidad de contaminación emitida se disminuye en un 50%.

Componentes
El sistema está compuesto por una unidad de mini-cogeneración, la cual además de generar el calor necesario para calefacción y agua caliente también genera corriente para la propia red y para cargar las baterías. El inversor externo bidireccional garantiza, mediante un sistema especial de control de carga, una corriente alterna de 230 V/50Hz, utilizada normalmente en hogares, y controla así mismo la carga y descarga del set de baterías que se precisan para un suministro constante de electricidad.

Un acumulador central de calor, alimentado directamente por la unidad de mini-cogeneración, es el encargado de satisfacer la demanda de calefacción y agua caliente. Si, debido a una mayor necesidad de calor, se genera más corriente de la que se precisa en el edificio o de la que pueden absorber las baterías, el sistema se descarga de forma inteligente, la transforma directamente en calor adicional mediante una resistencia eléctrica situada en el acumulador.

Si por el contrario, la demanda de corriente es tan elevada que el sistema de calefacción no puede absorber el calor generado, un refrigerador de emergencia se encarga de verter este calor en el ambiente. De esta manera, el sistema en isla garantiza un suministro seguro y confortable de energía durante todo el año incluso cuando se precisan cantidades de calor y corriente muy elevadas y es tan sencillo y eficaz como un sistema de calefacción convencional.